responsabilidad emocional

somos responsables de nuestro estado mental, emocional y físico
nadie más que nosotros es capaz de movernos hacia la situación ideal de nuestra vida o aquella que queramos vivir
cuando eres niño sientes que tu vida la deciden los otros, y en gran medida así es, pero eres tan libre de espíritu que te dejas llevar por lo que sucede
a medida que crecemos, nos sentimos mas dueños de nosotros y de nuestro destino, nosotros tomamos el rumbo, decidímos como será nuestra vida
hay un momento en que nos sentimos independientes, que no necesitamos de nadie, que nadie nos puede parar
hay un momento en que decidimos que la vida laboral y los asuntos sociales mundanos son el eje de nuestra vida
hay un momento en que eso te queda corto, y no te llena lo sufuciente, quiza es demasiado momentáneo, quizá demasiado efímero
hay veces que decidimos vivir en ese instante efímero aunque sepamos que no es nuestra vida, que es una actividad, que no se construye más lo de lo que desaparece al final de cada trabajo o de cada reunión
hay un momento en que necesitas que las relaciones duren más, que te brinden más contensión, más estabilidad, más apoyo, que sea mutuo
pero hay un momento en que es difícil decirle adios al proceso de decir: soy yo, estoy sólo y así me siento bien, con el momento de decir: necesito de alguien más, quiero tener una vida más equilibrada, quiero crecer...
esa decisión es difícil, cuesta
porque en el momento de lo efímero pero  reconfortante, vacío pero divertido, ahí se puede vivir siempre, es fácil, con sus momentos de soledad y de desesperación, pero siempre llega algo que nos hace sentir nuevamente euforia aunque sea por un momento, y otra vez el vacío y otra vez la euforia...
dar el paso siguiente es estar consciente que no estás sólo y que ahora tu responsabilidad radica en tí pero emana la vida de otras personas, que hay otros que también cuentan contigo, que dependen quizá de tí de alguna manera
saberse en esa situación y aceptarla es un acto de madurez y de responsabilidad que no todo mundo puede hacer y lograr
personalmente siento que he pasado de un extremo a otro y que ninguno ha sido bueno, siento que deje todo por el trabajo y el éxito social, laboral, personal, sentirse reconocida... un día quise construir del lado personal, emocional, crecer y entonces deje todo, y tampoco estuvo bien y cuesta la recuperación del otro abandono.... ni los amores ni el trabajo puede sostener tu vida ni tu corazón
sólo tu lo puedes hacer encontrando un equilibrio de todo lo que te rodea
cuando decides vivir tu vida en unión a otros tienes que aceptar que ellos también dependen de tí de alguna manera quizá no vital pero si emocional, y creo que parte de crecer es aceptar que la responsabilidad emocional radica en tí mismo pero que se extiende hacia otros y que eso esta bien, sin sufrimiento y sin reclamos, sino con entendimiento y comprensión
ahora mi problema es sobre las expectativas que genera este compromiso, pero de eso, me ocuparé en otro momento, porque no se puede crecer más que paso a paso ...